Capítulo 312

Diez minutos después, Matilda y Antonía salieron de la cafetería sin que nadie supiera lo que habían dicho.

Matilda volvió a la oficina y empezó a pensar en cómo iba a salvar al Grupo López.

De repente, se acordó de los 140 millones de dólares que el Grupo Ramos había invertido en Esplendor Bordado, y que ella podría resucitar al Grupo López si sacaba un poco de ese dinero y se lo inyectaba al Grupo López. Cuando tuviera el dinero, podría entonces devolverlo, y seguramente nadie se enteraría.

Pensando en esto, Matilda tomó inmediatamente una decisión.

Cerca del mediodía, Matilde transfirió el dinero a Ricardo, aliviada pero al mismo tiempo descontenta con Ricardo y Beata. Si Ricardo y Beata no la hubieran retenido siempre, probablemente ahora estaría con Leonardo.

En los días siguientes, las ventas de ropa de Esplendor Bordado habían sido elevadas, pero también había perdido mucho dinero, y sólo la pérdida de esta semana ascendía a más de un millón de dólares.

Matilda tuvo que abortar la guerra de precios debido a la fuerte oposición de los accionistas. Mientras los accionistas estaban molestos con ella, ella también estaba muy molesta con esos accionistas.

Para ella, esos accionistas son un grupo de pensamiento anticuado, no saben adaptarse.

Querían ganarse a MY, perder algo era muy normal, sólo para poder apoderarse rápidamente del mercado, pero esos accionistas la detenían.

La sensación de estar constreñida la hacía muy infeliz, incluso quería echar a esos accionistas de Esplendor Bordado, pero ahora mismo, aún no era estable, todavía necesitaba a esos accionistas.

C

Por otro lado, Natalie y Tina estaban en el despacho calculando las pérdidas de Esplendor Bordado de esta semana.

dólares. Esplendor Bordado podría aumentar su cuota de mercado si

mucho mayor. MY debe presentar productos excelentes el próximo trimestre, o de lo contrario es probable que sea contraatacado. Por cierto,

para ella. Si todo va bien, los primeros diseños deberían salir dentro de

esta cadena de ropa de

-De acuerdo, lo sé.

hablar de negocios, Tina miró a Natalie y le dijo lentamente:

ssed t

P

cejas, -¿Qué?

que tengo un hombre con el que estoy

invitarte a cenar. con él, así

tengo tiempo, pero

-¿Leonardo?

-Sí

hay problema, hablo con

llamó a Leonardo y le habló de

la noche.

por

baja:

frunció los labios, -¿Qué pasa? ¿Vas a

a la mansión

decepcionada: -Vale, ya lo

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255