Capítulo 56

-¡Qué descarado eres tú!

Nerea agarró un devolverle el

trozo de Lego y se lo lanzó, él gritó de dolor y dos trozos para ataque, -¡Eres mayor, no deberías abusar de un pequeño!

-¡Es más fácil abusar de los pequeños!

Las risas y voces alegres se filtraban en la cocina, donde Roman, a través del cristal esmerilado, observaba a Nerea y al niño riendo y jugando, perdiéndose en el momento.

Esa escena era como los sueños que había tenido durante tantas noches inquietas, incluso mil veces

más hermosa.

Aunque fuera solo una ilusión efímera, deseaba que durara un poco más, mucho más, preferentemente para siempre.

Una hora después, el mayordomo bajó las escaleras y se inclinó hacia ellos, -Señorita Nerea, Neo, el señor ya ha preparado la cena. Por favor, pasen al comedor del segundo piso.

-¡Vamos!

Nerea y Neo, compitiendo por ser el primero, se lavaron las manos y entraron al comedor del segundo piso, donde vieron dispuestos en el centro de la lujosa mesa europea, cinco o seis platos con un aroma

y

la boca, una selección exclusiva de delicias

qué rico olor y qué

todo esto

Roman. Aunque aún no lo probaba, solo con ver la presentación y el colorido, sabia que

cena sería algo simple, pero resultó ser un festin de platos

me voy

coloridos.

platos, cangrejo imperial, ostras a la parrilla, pollo con yogurt… finalmente eligió un trozo de cangrejo, cuya carne, preparada con

increiblemente delicioso, ¿cómo puede ser

cerró los ojos de felicidad,

también entusiasmado, decía,

para elogiar, probó cada uno de los platos en la mesa, ¡todo estaba delicioso,

casi increible que Roman, un empresario con tantas responsabilidades, no solo supiera

que exista una

todo, se dio cuenta de que Roman no

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Capitulo 56

-¿Me pasé de la raya? Es que tu comida está tan rica que me hace

-No.

de la raya, era adorable, muy adorable…

gusta, come

-¡Claro!

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