Capitulo 126

Capítulo 126

Pensando en ello, Maia no sabia si era demasiado miedo o se sentia demasiado injustamente tratada, las lágrimas le brotaron de golpe, atrayendo a los criados que, sin saber la situación, se acercaron a consolarla, casi alertando a los padres de Laureano,

-¿Todavía tienes cara para ponerte a llorar? ¡Pidele disculpas a Nerea ahora mismo!

Laureano frunció el ceño, perdiendo la paciencia.

Le estaba dando una oportunidad de disculparse con Nerea. Si no lo hacía y seguía con sus berrinches, temia que luego ni siquiera pudiera llorar.

Conociendo el temperamento de Roman, si cruzabas sus limites, iba a sufrir consecuencias graves.

Nerea, observando a la chica que primero la insultó y luego empezó a llorar lágrimas de cocodrilo, no pudo evitar reirse.

locuras, pero

por la espalda, otros se pavonean respaldados por sus protectores, y ahora apareció ella, que la atacó y luego

cada locura, habia que aplicar diferentes estrategias.

menos aún iba a ponerse fisica, mucho menos en la Mansión Sanz. Por más que detestara a Roman, no iba

estrategia era…

hay problema, la Srta. Maia no

ampliamente, su compostura y generosidad sorprendieron a

enojó, en cambio lo dejó pasar con una sonrisa. ¡Eso sí que era tener la gracia y el porte de una dama

sonrisa encantadora, -Fui yo quien

¿Qué?

incrédula, no podía

era la novia de

¡Imposible! ¡Absolutamente imposible!

lo conocía bien, sabía que Roman era distante con las mujeres, por eso siempre le decía que no perdiera su tiempo con él.

que ser otra mentira de esta

a Roman, sus ojos brillaban, su sonrisa era deslumbrante, como la de una seductora que podría causar la caída de un imperio, dejando

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