Capítulo 143

Simón condujo hasta la mansión, y al escuchar el timbre, Sofía se apresuró a abrir la puerta.

“Cuñada, yo… vine a recoger el móvil de mi hermano.”

Al escuchar la voz, Leonardo y Noelia bajaron corriendo de sus habitaciones.

“¿Mamá, quién ha venido?”

Simón miró a los dos niños parados detrás de Sofía, especialmente a Noelia, cuya apariencia era bastante encantadora. Siempre había escuchado hablar a Ari sobre ellos, pero ahora finalmente los había conocido. No era de extrañar que su hermano siempre los mantuviera alejados.

Simón, con una sonrisa, se agachó para estar a la altura de los niños.

Sofia los presentó: “Leo, Noe, saluden al tío Simón.”

“Hola, tío Simón,” dijeron los pequeños de forma educada.

Simón levantó a Noelia en brazos, quien no era tímida en absoluto y se dejó llevar hacia adentro por Simón.

Tio Simón, ¿trabajaré con mi papá?” preguntó Noelia.

“Si, y

segundo tío viaja mucho al extranjero, no está mucho por aquí.

felicidad: “Genial, hoy quiero ir a la empresa de papá

¿Podemos dejarlo para cuando volvamos?” Simón se encontró en un aprieto al

de viaje para que no sospecharan de

Menuda preocupación.

en el estudio, puedes subir a buscarlo tú mismo. Noe, baja por ahora, espera a que el tío Simón

el tío Simón

la

días y que en este momento dijeran que tenía que viajar. Sentía

En el estudio.

Noelia y vio el móvil sobre

Cogió el móvil.

llévame a la habitación de tu papá, voy

Noelia inclinando su cabeza, si iba a ser largo, eso significaba que no vería a

podría ser, es mejor estar preparados.”

estado de su hermano, era evidente que

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