Capítulo 11

Cuando ella pregunto, el ambiente se volvió incómodo. Clara se sintió extremadamente avergonzada.

Raúl estaba a punto de decir algo desagradable, cuando Luka soltó una suave risa. Le dijo seriamente a Silvia, “Clara es mi amiga, ¡por supuesto que Raúl la conoce! Tranquila, Raul te es completamente fiel.”

Dicho eso, miró a Raúl con una mirada burlona. Raúl se puso pálido y se levantó de su asiento llevándose a Silvia.

Cuando se fueron, Luka le dijo a Clara, “En una ciudad tan grande como Bogotá nos encontramos, Clara, la próxima vez buscaré un lugar donde Raúl no pueda verte, para que no te moleste.”

Ella pidió la comida y dijo en voz baja, “No necesito evitarlo a propósito, ¿acaso debo evitarlo toda mi vida porque terminamos? Además, no he hecho nada malo.”

Al oír eso, Luka frunció levemente el ceño. De repente dijo, “Voy al baño un momento, si llega la comida puedes empezar a comer.”

Clara no sospechó nada.

Después de que Luka se fue, sacó su teléfono y contactó a los padres de algunos de sus estudiantes para confirmar la próxima clase.

Diez minutos más tarde, Luka aún no había regresado, Clara estaba perpleja, cuando de repente se oyó un grito agudo de una mujer desde el baño del restaurante. Todo el restaurante se volvió caótico.

la escena, había manchas de sangre en las

sentados en la estación de policía, Luka y Raúl habían sido detenidos por

voz transmitía su llanto, “Hermano… Raúl ha tenido una pelea, estamos en la estación de

la cabeza de Clara se llenó

que tenía en mente era Raúl y con angustia empezó a tratar sus

golpeó más fuerte que yo? Solo

es uno de los nuestros, ¿cómo pudiste golpearlo así, haciendo que Clara se ría de nosotros, cómo va a cortejarla

mirando

estaba fingiendo! ¿Cómo se atrevió a provocarlo en el

Clara, ¿puedo cortejarla? Si no lo hago, alguien más lo hará! No puedes querer a dos mujeres al mismo

rio fríamente. ¡Había

cuando llegara Flynn, se molestara. No tenía ningún respaldo, no podía

“Clara, después tendrás que llevarme al hospital, mi cara está tan lastimada, ¿cómo voy a ver a la gente

un terrible

en ese momento, se escucharon pasos. Levantó la mirada por instinto. Era Flynn. Vestía con suma elegancia, un traje hecho a mano al estilo británico,

no miró hacia ese lado, fue directo a hablar con

“Abogado Bécquer, ¡lamento haberlo

¿Celos?

hacia este lado. Su mirada

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255