Despidiéndose de mi amor

Capítulo 0128

Julio sintió un fuerte nudo en la garganta. Un contrato… ¿Qué más

necesitaban entre ellos?

Preocupado de que Silvia no estuviera dispuesta a quedarse, le

respondió con gran renuencia: -Escribelo tú primero.

Si lo que ella escribía no estaba bien, él definitivamente no lo

aceptaría.

Después de cambiarse de ropa, Julio se subió al coche y se dirigió hacia la finca Quintas del Arroyo.

Tan pronto como llegó, vio a Juan acostado muy triste en la cama. con grandes lágrimas en su rostro.

-Señor, finalmente has venido a verme. ¿Le dijiste a papà que me trajiste contigo?

¿Cómo podría saludarle a Luis despues de llevarse al niño?

Julio levantó una ceja: -A estas alturas, él ya lo sabe.

Juan tenía la nariz muy roja y los ojos oscuros llenos de lágrimas: – Entonces, ¿por qué no viene a recogerme a casa? Echo de menos mi hogar, echo de menos a papa…

le pasó un pañuelo.

en eso. Él

¿Cómo podria

a los niños de esa manera, jera verdaderamente muy despreciable!

mostrar que era verdaderamente un niño pequeño, comenzó a

a Juan. Papá incluso dijo que en

tan oscura como la noche, y la temperatura dentro de la habitación

instantáneamente.

tener más hijos con Silvia?

Juan continuó deliberadamente: -Si, papá dijo que quiere tener muchos hijos

¿Era que todos los hombres despreciables eran como él, que no permitían que otras personas obtuvieran lo que él no quería?

si esto es así, ¿por qué tu mamá regresó al

no sobre la grave ación, por lo que solo

un

reaccionar.

darme hermanitos -dijo, parpadeando con sus grandes

serio.

Luis. Se dio cuenta de que alguien estaba restringiendo sus

tener hijos, ¡realmente, que

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definitivamente Julio. Nunca había sido bueno consolando a los niños, pensando que eso sería suficiente para resolverlo, así que se levantó de inmediato para irse.

las piernas, frotando su traje con sus

quiero a mamá, quiero a papá, eres un hombre malo,