Despidiéndose de mi amor

Capítulo 0235

No solo la residencia privada de Viviana estaba bajo investigación, sino que toda el área del barrio Hiedra estaba siendo minuciosamente examinada. Por suerte, Oscar había sido llevado por David, porque en la villa de Viviana, todos los sirvientes estaban siendo interrogados discretamente uno por uno.

Julio, con sus profundos ojos, miraba fijamente a Silvia.

-¿Cuántos días más quedan?

Capítulo 0235

No solo la residencia privada de Viviana estaba bajo investigación, sino que toda el área del barrio Hiedra estaba siendo minuciosamente examinada. Por suerte, Oscar había sido llevado por David, porque en la villa de Viviana, todos los sirvientes estaban siendo interrogados discretamente uno por uno.

Julio, con sus profundos ojos, miraba fijamente a Silvia.

-¿Cuántos días más quedan?

Silvia se quedó sorprendida por un momento, luego poco a poco comprendió lo que él quería decir.

-Diez días.

Para ser exactos, sin contar hoy, solo quedaban tres días para que ella se fuera.

-le

-He reservado boletos para Toledonia. Nos iremos esta noche le dijo con firmeza Julio.

Los ojos de Silvia se llenaron de gran asombro.

-¿Ahora? ¿Cuándo regresaremos?

Ella pensó por un momento que Julio había renunciado a la idea de ser una pareja de verdad.

-Pasado mañana.

Julio había encontrado preciso el plan de viaje que Silvia había hecho anteriormente. Irían a Toledonia para ver el hermoso paisaje nocturno y al día siguiente visitarían el lugar de la historieta que más le gustaba a Silvia.

-Está bien.

Regresar pasado mañana, justo llegaba a tiempo.

-Voy en este momento a empacar.

-No es necesario, allí tenemos todo lo que

-De acuerdo.

necesitamos.

Silvia planeaba avisar a Luis, pero parecía que tendría que esperar hasta llegar a Toledonia.

Media hora después, se encontraban abordando el avión privado. Silvia se sentó tranquila junto a Julio, mirando las luces titilantes del exterior. Con un vuelo de más de tres horas por delante, y debido al embarazo, empezó a sentirse muy somnolienta y pronto se quedó dormida.

Julio,

,que no había dormido bien la noche anterior por haber bebido tanto y no haber descansado hoy, observó detenidamente el rostro tranquilo de Silvia mientras dormía. Cuando

Adrian se acercó para ofrecerle la manta, se percató de la tierna escena.

Julio de inmediato aparté la mirada, tomó la manta y la colocó con suavidad sobre Silvia antes de dirigirse a otro compartimento con Adrian para descansar.

listo en el hotel?-lo preguntó

arreglado–respondió Adrian, antes

señorita Orellana

levantó con asombro una

que lo haré, realmente puedo

todo esto…?–le preguntó Adrian

no me rindo con tanta facilidad -Julio hizo una breve pausa.

lo que realmente quiere y cuánto

no quería admitir que había desarrollado fuertes sentimientos

¿por qué sugerir ser una pareja real bajo el

a seguir con el tema, simplemente

Orellana realmente no está a su altura. No debería gastar tanto

ella.

demasiado le dijo Julio con total

disculpó

horas después, el avión

parecía que no podía dormir lo suficiente. Bajó con tranquilidad del avión junto a

ordenó a su equipo que se retirara y ambos comenzaron a pasear por las calles de Toledonia. Silvia caminaba muy

restaurante que ella había querido visitar en el pasado.

estaba llena por completo de flores y cajas de

15 BONUS

tomado medicamentos para prevenir su alergia

-Silvia se volteó hacia

regalos le respondió

hermoso collar de una marca de lujo que había querido

diario,

así que leí algunas

sentia cada vez más desconcertada por él. Dejó la caja de

todo esto. Devuélvelos todos, por favor.

las notas que

quedó sorprendida por un momento, luego poco a poco

decir.

-Diez días.

hoy, solo quedaban

boletos para Toledonia. Nos iremos esta noche le dijo con

de Silvia

gran

asombro.

-¿Ahora? ¿Cuándo regresaremos?

por un momento que Julio había renunciado a la idea de ser una

-Pasado mañana.

encontrado preciso el plan de viaje que Silvia había hecho anteriormente. Irían a Toledonia para ver el hermoso paisaje nocturno y al día siguiente visitarían el lugar

-Está bien.

mañana, justo llegaba a tiempo.

en este momento a

necesario, allí tenemos todo lo que

-De acuerdo.

pero parecía que tendría que esperar hasta llegar

Silvia se sentó tranquila junto a Julio, mirando las luces titilantes del exterior. Con un vuelo de más

y no haber descansado hoy, observó detenidamente el rostro tranquilo de Silvia

+15 BONUS

se acercó para ofrecerle la manta, se percató de la

la colocó con suavidad sobre Silvia antes de dirigirse a otro

en el