Domesticame! Mi pequeña y gran Elia

Capítulo 315

La mujer se quedó petrificada de repente, como si alguien hubiera desenmascarado su más profunda farsa, revelando una pizca de pánico y culpa, pero rápidamente lo ocultó

Lucho por liberar su mano de Elia, se retiró y agarró firmemente la mano de su hija, desahogando toda su ira y resentimiento en la niña “¿Por qué lloras? ¿No es suficiente lo miserable que es tu madre? ¡Qué mala suerte tengo al tener una hija como tu!”

Mientras regañaba a su hija, también regañaba a Elia, llena de resentimiento, y se marchó.

En casa, siempre utilizaba el amor por su hija como excusa para exigir que su marido hiciera esto y aquello, tratándolo como un esclavo.

Si algo no iba a su gusto, acusaba a su marido de haber lastimado a su hija y lo reprendia en voz alta, diciendo todo tipo de palabras feas.

Ella estaba utilizando el amor por su hija para buscar su propio beneficio

El amor por su hija era su disfraz, su verdadera faceta era extremadamente egoista y venenosa.

aguantaba, lo

la vio a través

su farsa habia sido descubierta y enojo porque habia sido

de rabia sin lugar donde desahogarla, solo podia desquitarse con

a la mujer alejarse con su hija y sintió lástima por la pequeña

todas las madres en este mundo aman

y vio a los niños parados ordenadamente contra

extremadamente obedientes

la vez

dijo Elia a los pequeños, y

Abel no la vio en la entrada del

sala de descanso con los niños, miró a su

estaba tan ansiosa que se sentia

si Abel se

hombre malo

lo sostenía estaba temblando, sabía que su madre estaba