Domesticame! Mi pequeña y gran Elia

es

Capitulo 662

Al escuchar la confusión de Diana, Elia apartó su mirada, bajo las pestañas y sonrió suavemente, diciendo: “Quizás el jefe ha cerrado un trato de nuevo”

Fue entonces cuando Diana se dio cuenta: “Claro, el jefe incluso asistió al funeral de la abuela del presidente Griera ayer. La relación entre ellos dos debe ser buena Este pequeño proyecto, si él lo maneja bien, seguramente podrá concretario“.

Elia sonrió a medias y dijo. “Si“.

“Ahora que lo mencionas, yo realmente no conocía bien al Grupo Griera. Al principio pensé que el Grupo Griera no fabricaba productos electrónicos, por lo que no tenia fábricas. No deberia haber dudado del juicio del Sr. Fuentes, elegir trabajar con el Grupo Griera fue lo mejor“. Diana se arrepintió de haber cuestionado la decisión de Vicente.

Pensó que el Grupo Griera no tenia fábricas para producir productos electrónicos y que trabajar con el Grupo Griera era simplemente encontrar un intermediario para que el Grupo Griera encontrara otras fábricas.

Fue muy ignorante de todo el poder que atesoraba el Grupo Griera.

“Ahora que lo mencionas, este Sr. Griera es realmente impresionante. Hace dos meses, acaba de adquirir una empresa de electrónica, precisamente esta empresa llamada Serelia. Ahora que está trabajando con nuestro jefe, la fábrica de esta empresa puede producir teléfonos móviles para el Grupo Fuentes“.

Diana hablaba para sí misma, al mismo tiempo que ordenaba sus documentos.g2

hacia Elia y preguntó con curiosidad: “Eh, este Serelia Tecnologias Electrónicas Limitada, tiene una ‘Elia‘

“¿Cómo podria ser? Si tuviera

“Eso

salir

comenzó a organizar rápidamente

y al final usó la empresa de Sergio para producir

te acostaras con su novia, y luego le

pensar en esto, Elia tembló, sintiendo lástima por Sergio y

se podría culpar a la

y Diana llegaron a la fábrica de Serelia Tecnologias Electrónicas, donde los

camiones

a Elia y Diana a visitar la

el Grupo Fuentes, y era el Grupo Fuentes el que tenia que asumir los problemas, la calidad y los equipos de la

confiaba en Asier, Vicente era una persona cautelosa y siempre

seguían detrás. Al pasar por un taller, de repente una mano se extendió, agarró el brazo de Elia y la

se sorprendió y estaba a punto de gritar cuando una voz masculina familiar y seria dijo: “Elia, soy yo“.

de que era Sergio. Suspiró aliviada y preguntó con confusión: “¿Qué haces

hablaba, miró hacia adelante, donde Vicente y Diana todavía