Domesticame! Mi pequeña y gran Elia

Capítulo 1000

Al escuchar que queria acompañarla, Elia sintió un nudo en el estómago, y su cuerpo se tensó con precaución. No necesitaba que Gabriel la acompañara, ¿acaso él buscaba amenazarla de nuevo?

“Ella solo está a unas cuadras, ino hay necesidad de acompañar a nadie! Siéntate y sigue comiendo,” dijo Adela con molestia, agarrando la muñeca de Gabriel para que volviera a sentarse.

Frente a la firmeza de Adela, Gabriel no tuvo más remedio que callarse. Por algo tan pequeño no valía la pena discutir y que ella le sacara en cara viejas peleas.

Gabriel se sentó de mala gana.

Adela le pasó el tenedor y le dijo: “Sigue comiendo.”

Gabriel frunció el ceño, estaba harto de Adela, deseando poder alejarse de ella en ese mismo instante.

Pero Adela tenia un control firme sobre él.g2

Sin dinero, él no era nadie.

Tenía que soportar su disgusto y seguir fingiendo un matrimonio feliz mientras comían juntos.

apresuradamente y subió a su coche, alejándose rápidamente.

y circulaba por la carretera despejada, y solo entonces Elia pudo relajar sus

contenida se

conteniendo la tensión y la

ese momento que tenia el número de teléfono de Gabriel y la dirección IP de su red, solo necesitaba encontrar a Abel para que hackeara el

así su madre no tendría que sufrir las consecuencias psicológicas de una posible filtración del video.

media de la tarde. Abel

luego recoger a los niños del jardín de infantes. Así, el tiempo.

escuela había

condujo hacia

se sentó esperando su comida, mirando su

que tenga buen dia, esperamos verlo pronto,” se escuchó la voz cortés de un

no le prestó atención y siguió con su celular, hasta que una sombra grande se detuvo junto

la pantalla de su

rostro amable y una sonrisa natural, parecia tan refrescante y confortante como

exclamó Elia sorprendida

su habitual sonrisa cálida, Ramiro

gran coincidencia,” respondió ella. Había elegido un restaurante al azar,

encontraría con Ramito.