Dulce Disparo al Jefe Cachorro Enamorado

Capítulo 79

Las palabras parecian golpear directamente en su corazón. Violeta tomó una respiración temblorosa, pensando que habla ofendido a Rafael. Lo observó con nerviosismo, buscando signos de desagrado en su rostro, pero solo encontró una mirada profunda, similar a la de un pozo antiguo.

De repente, él agarró su mano y la hizo tropezar hacia él. Debido a la fuerza y la postura, Violeta terminó agachada frente a él como un cachorro perdido.

Intentó levantarse, pero un toque de su dedo en su frente fácilmente la hizo volver a su lugar.

Su rostro estaba tan cerca, haciendo que ella se sonrojara.

Rafael la miró y le preguntó: “Eso es todo, solamente me vas a dar un simple feliz cumpleaños?”

Violeta se sintió incomoda. “¿Puedo prepararte un pastel de cumpleaños?”

“Ya comi”, le respondió Rafael, de manera abrupta.

“Uh…” Violeta pensó un poco, luego preguntó con vacilación, “¿Qué tal si te canto una canción de cumpleaños?”

“¿Como una ópera?” Rafael levantó una ceja.

“No, no…” Violeta se sintió avergonzada.

Ella sabia cantar algunas arias de ópera, pero nunca habia practicado la canción de feliz cumpleaños…

Rafael miró a Violeta con intensidad durante un momento, luego sus brazos flácidos cayeron sobre sus rodillas. “¿En serio no me preparaste nada?”

Si no recordaba mal, fue Raúl quien le recordó su cumpleaños hace una semana. –

Se lo dijo con antelación, seguramente había tenido tiempo suficiente para prepararse.

Rafael recibia muchos regalos cada año en su cumpleaños, la mayoria de los cuales despreciaba. Algunos incluso estaban aun guardados durante años sin abrir.

Pero ese año, tenia un deseo especial de recibir un regalo de Violeta, era algo que no habia sentido en mucho tiempo.

“Um…” Violeta asintió.

Al ver su expresión sombria, rápidamente se disculpó, “Lo siento

“No me importal” Rafael repitió, su tono de vos se volvió un poco más serio gueantes. Luego se levantó abruptamente del sofá y le lanzó una mirada feroz. “Ve a bañarte y a dormir!”

Violeta se encogió.

de que no la dejaria escapar

puso de pie. Pero debido a su posición, su bolso chocó contra la

Rafael lo descubriera, se apresuró a recoger los

demasiado tarde. Rafael extendió su brazo

“Uh…” Violeta tartamudeó.

un poco más grande que su mano. Estaba

cambió con emoción. “¿Es

dijo nada, su expresión

tener más opción, la miró mientras abría la envoltura, su

abrió la caja, encontró una afeitadora eléctrica.

voz con alegría. “No dijiste que

verguenza, “Raúl trajo una bolsa llena de cosas de marca, incluso vi las llaves de un coche… ¿Cómo podria

mucho tiempo, pero finalmente decidió comprarle

encendedor o una afeitadora. Pero el encendedor parecia demasiado

del mediodia, habla ido al centro comercial a comprarla

de hablar y se encontró con la mirada de Rafael. Sus ojos

apartó la mirada, sintiéndose

se puso de pie, tratando de cambiar de tema. “Es una marca local. Nunca he comprado nada parecido antes

hablaba, extendió la mano para explicarle

antes de que pudiera tocarlo, él abrazó

la toques, jes mial”

medio cuerpo para proteger su

reacción de él. Abrió la boca para decir algo, pero él ya

paso que daba hacia arriba, su cabeza se mantenía

de que Violeta fuera

un beso, ella se derritió junto

al suelo, como de costumbre. Rafael bajó la cabeza,

“Hum, Rafael

lamiendo sus

sus padres que lo llamó por su nombre completo,

se volvieron más

“Rafael Castillo…”

“De nuevo!”

“Rafael Rafael Castillo”

la mañana siguiente, Violeta despertó todavia con dolor

habia gritado su nombre por orden suya la noche anterior. No sabia por qué, pero cada vez que lo hacía,