Dulce Disparo al Jefe Cachorro Enamorado

Capítulo 137

“No… no…” Ella negó con la cabeza, nerviosa.

“¿Entonces estás intentando seducirme?” preguntó Rafael, entrecerrando los ojos con peligrosidad.

“No… no…” Violeta se sintió injustamente acusada, pero el alcohol la hacía hablar con dificultad.

Rafael no soltó su mano, cubriéndola con su palma. De alguna forma, los botones de su camisa se habian desabrochado, como si fuera magia, dejando a la vista su pecho firme.

Violeta se sintió abrumada por la escena, aún más aturdida. Cuando intentó apartar la mirada, él se inclinó hacia su oído y la llamó.

“Vivi.”

Se quedó paralizada.

Ese apodo se deslizó en su oido sin previo aviso, como si una pequeña pluma acariciara su corazón.

Nadie la habia llamado asi antes.

Sus seres queridos la llamaban Violeta, incluso Julián solo la llamaba Leta. Era la primera vez que alguien pronunciaba su nombre de esa manera, los dos silabas mismos sonaban con ternura y nostalgia.

Violeta tragó saliva, atónita. Su barbilla fue levantada suavemente, “Vivi, quiero aprovecharme de la situación.”

Su corazón latia a un ritmo frenético.

El significado de esas palabras…

Violeta levantó la vista y vio que sus ojos oscuros y profundos habian comenzado a brillar intensamente, como si quisieran devorarla.

Como si hubiera estado reprimiéndose durante mucho tiempo, Rafael expresó sus deseos de manera directa: “¡Te quiero!”

Violeta sintió como si esa frase hubiera explotado en su cabeza.

Rafael, como si estuviera haciendo una flexión, se suspendió sobre ella con la fuerza de sus brazos. Al doblar ligeramente los codos, su aliento caliente se posó sobre sus pestañas, “Te daré diez segundos para pensar, si no te niegas, lo tomaré como un sí.”

“Diez, nueve, ocho…”

Comenzó a contar, aumentando el ritmo hacia el final, “tres, dos, uno!”

estaba ya bastante aturdida, incapaz de reaccionar

que se formó

cayó sobre

La besó.

resultó en un gemido suave. Mientras su conciencia se volvía cada vez más

siendo el

sacado un envoltorio de aluminio y

1 y vio

su nuez de Adán se movió, su voz profunda y seductora resonó en su oldo,

completamente embriagada.

Capitulo 137

despertó con la luz del

incluyendo el suéter de punto y los pantalones enredados en el suelo, y los innumerables

sentía débil, como si alguien la hubiera

sentó de golpe al darse cuenta de que el lugar

monocromáticos y masculinos, pero no le era extraño. Después de mirar a su alrededor, pudo confirmar que estaba en la habitación de Rafael, al otro lado del pasillo. Con esa realización, los recuerdos de la

se reproducían en su

de

“¡Te quiero!”

de dolor. El alcohol no solo era un veneno que atravesaba el estómago,

noche anterior, bajo la influencia del alcohol, ella había terminado

el baño indicaba que Rafael estaba

se calmó durante un par de segundos, luego levantó cuidadosamente las sábanas y comenzó a recoger su ropa del suelo y vestirse, sin importarle

bolso, se arrastró hacia la puerta como una ladrona.

puerta, una voz masculina y tranquila sonó detrás de ella, parecia un poco ronca después de la noche de pasión, “¿Planeas

en la puerta del baño, secándose el cabello

una sonrisa irónica.

“Eh…” balbuceó, avergonzada.

ducharte.” Rafael señaló

negó con la cabeza, “No hace falta, voy a

salió

cruzó al otro lado y la cerró detrás de

borrar la marca que él había dejado en su cuerpo, cualquier lugar visible estaba marcado con manchas

cambió de ropa y miró su reflejo en el espejo, frustrada por su falta de control la noche anterior.

misma que nunca volvería

los mismos medios que antes para forzarte a