Capítulo 270

Al igual que la última vez, el niño se subió al Mercedes por la tarde

Pablo, el chofer, y Lucia llegaron nuevamente al hotel Tras la experiencia de la última vez, Lucia ya no estaba tan desorientada, sabia que Nono había venido nuevamente para esperar a Violeta. Asi que ella también se

sento tranquilamente a esperar

Paro, para su sorpresa, esperaron hasta que el sol se puso y la noche cayó, pero Violeta no apareció

Lucia fue a preguntar a los empleados del hotel, y fue entonces cuando se entera de que Violeta ya no estaba hospedada en el hotel

Cuando le informo de esto al nino, el no le creyó y no quiso escuchar a mas nadie Entonces, Lucia lo llevó al piso de arriba para tocar la puerta de la habitación de Violeta. Alguien abrio la puerta, pero en lugar de Violeta habia una pareja de jovenes

Pensaban que la espera habia terminado, pero al día siguiente, el nino insistió en volver al hotel

Pero al tercer dia, jel niño estallo!

Comenzó a hacer berrinches, derribo todos los jarrones que pudo encontrar en el vestibulo del hotel y tiro todo lo que veia al suelo. Parecia una escena de desastre, con gente corriendo en todas direcciones. Los empleados reconocieron que era el hijo de Rafael, por lo que nadie se atrevió a decir nada ni a intervenir.

Lucia intentó calmarlo, pero nada funcionó.

Viendo que el nino estaba fuera de control, Lucia no tuvo más remedio que llamar a Rafael por ayuda

Cuando Rafael llegó, su hijo estaba parado en una silla, intentando arrancar una pintura de la pared

Pablo, Lucia y los empleados del hotel estaban en un estado de caos, temiendo que pudiera caerse y lastimarse, pero no podian acercarse porque estaba como un pequeño leopardo enfurecido, mirando furiosamente a todos y blandiendo sus pequeñas manos, incluso mordiendo a los que intentaban tocarlo

Rafael se adelanto rápidamente y tomó a su hijo de la silla.

El pequeño vio a su padre, pero no mostró signos de calmar su berrinche, al contrario, estaba luchando violentamente para liberarse.

¡Cristiano!

frincio el ceño y

com

expresión temerosa en su rostro, pero esta vez, no funciono pre Pronto, volvió a inflar sus mejillas y miró enojado

uno grande y uno

o era caprichoso, Rafael simplemente lo llamaba por su nombre con severidad. Nunca le habia levantado la mano a su hijo, ni tenia intención de hacerlo, asi que ahora

el pequeño de repente

apenas tuvo tiempo

se giró, vio que, al igual que la última vez en el restaurante, su hijo habia luchado para liberarse de él y se había lanzado hacia una mujer

pequeño con

¿Qué está pasando?!

expresión de lágrimas en los ojos de su hijo y su voz de desesperación, se sintio tan entristecida que no le importó nada más, se agachó y comenzó a secar apresuradamente

na liores más…”

alentado por su voz suave, comenzó

lágrima parecia caer directamente

he

un pañuelo de papel, y al ver que el pequeño todavia la

se apresuro a aclarar,

encontrarte el pequeño sollazo

moto, sos lagrimas corrolan sus dedos, mientras le explicaba con una voz suave y paciente Ahora me estoy nerando con una amiga, asi que ya no estoy en el hotel Ho

la miro, todavia con el ceno

Si no me crees, en viviendo ahora?

¿Que tal :

su voz suave y melosa se volvió rasposa despues

extendió sus pequenos

ver que el niño había dejado de llorar, se sintió aliviada y rápidamente lo levanto en sus brazos, acariciando

Rafael se acerco al gerente del hotel y comenzó a rellenar un cheque, pareciendo resolver el asunto del destrozo causado por Nono. El gerente del hotel, lejos de estar enojado por los

al recibir el dinero

y Lucia se miraron

la multitud de espectadores comenzó a

hijo aferrado al cuello de Violeta, le dijo a los demás, Pablo, Lucia

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