El amor del Ceo mexicanoES by Pandora

Un bebé igual de hermoso

Por un momento el tiempo pareció haberse detenido, la mirada felina de los dos poderosos Ceos podía hacer temblar a cualquiera, Renzo no podía creer el nivel de posesivo que podía llegar a ser Cristóbal, al parecer el Ceo quería tener todo bajo su control Espero no incomodarte Camill, el bebé a estado extrañandote mucho, me a sido imposible confortarla, ya sabes que no puede estar sin comer de tu seno, el bebé quiere lo que quiere! Oh! por dios, mi bebé está hambriento! cómo cosa que estuviera ensalada el pequeño Cristóbal comenzó a llorar y a retorcerse en los brazos de su padre, entonces Camil lo tomó y como era de esperarse el niño buscaba con ansias y desespero el seno de Camil 

Renzo me puedes disculpar unos momentos para alimentar a mi bebé? Camill le pedía permiso a su jefe para retirarse un momento, cosa que al poderoso Ceo Altamirano le enfureció, por qué se ponía ella en está sỉtuación 

muera de hambre verdad? Renzo sonrió a Camill La hermosa madre subió al elevador para ir a su habitación y alimentar a su pequeño, fue toda una osadía distraerlo mientras llegaban a su lujoso cuarto, Renzo reverso habitaciones de primera clase para los dos, no iba a hospedar a Camill en las habitaciones normales verdad, ella se merecía lo mejor

muy a pesar de que no tiene ninguna necesidad o de que bien podría trabajar conmigo o seguir con el Ceo del Villar de asistente, pero ya que la hayas sacado del país y por dos

vaso de whisky a su boca, muy tranquilamente dijo, bueno pues nos tocará hacerle compañía a Camill por las noches! nos quedaremos el resto del viaje a su lado, espero que no te moleste? nosotros somos una pareja muy apegada, estamos acostumbrados a dormir juntos 1 Adelante Altamirano, yo pasaré el día con Camill en juntas cansadas y tediosas y tú puedes velar si descanso por las noches, te aseguro que caerá muerta de cansancio a la cama apenas lleguemos al hotel, dijo Renzo Hijo de puta! pensaba Cristóbal, no podía dejarse llevar solo por la rabia que le daba que ese maldito CEO ladrón de esposas! si le hacía una escena a Camill terminaría perdiendo ante el hombre perfecto que parecía ser Renzo Mandujano, tenía que confiar en lo que él tenía de ella, su amor, su pasión y también a su pequeño tazmanio, quién era el que los unia Después de alimentar