El amor del Ceo mexicanoES by Pandora

Chapter 128

Alimentando a otro bebé

Escuchar que su propio padre y su prima habían sido capaz de hacer pasar al bebé de Rodrigo por muerto, era algo que Camill simplemente no concebía, ella tardó unos minutos en poder hablar 

Lo siento mucho Rodrigo, mi padre después de nuestra fallida boda me a sorprendido y no precisamente para bien, aún así éste acto es abobinablemente maléfico, nunca los creí capaz de llegar a ese nivel de maldad, de verdad espero que puedas recuperar el tiempo perdido con tu bebé, y Silvia? dónde está ella? El pequeño está enfermo! Camill buscaba con la mirada esperando encontrarla 

Ella… miré a mi hijo llorar de dolor, yo… solo lo tomé y salí de inmediato con él para la clínica, no le di oportunidad de enterarse que veníamos, Rodrigo por supuesto que estaba mintiendo, sabía que ella estaba en su habitación escuchando llorar a Alejandrito y no salió a enterarse por qué lloraba tanto, le daba un poco de pena reconocerlo enfrente de Camill y el engreído de Altamirano que si tenía a Camill a su lado 

No tengas miedo bebé, aquí te vamos a cuidar muy bien y te vas a poner mejor pronto! le decía la hermosa mujer a el regordeto bebé de ojos azules, el niño balbuceaba algo que al principio no entendían hasta que lo dijo más claro má… má! 

más si se hubiera casado con él ese día que lo abandono en la iglesia, el pequeño Alejandro sería su hijastro y su pequeño bebé Cristóbal no existiría, volteó a ver a su hijo quien jugaba con su rosada lengüita en sus gruesos labios, sus brillantes ojitos no le quitaban la mirada de encima, mientras él estuviera allí, su bebé estaría tranquilo, con su

soltar a Camill, su padre lo quería tomar pero el se aferraba a la pijama de de la mujer, la bella joven se tuvo que sentar ue uno de los pequeños sofás de la habitación por qué el regordeto bebé pesaba bastante Entonces vas a llamar a Silvia, Rodrigo? si hijo está internado en una clínica a de estar buscándolo vuelta

sus varoniles manos, recién había aprendido como se hacía para

por más intentos que Rodrigo hacía no conseguía nada, el bebé seguía

buscando entre sus ropas, el había olido que había alimentó y quería probar, Camill ya desesperada dijo por qué no, abrió su pijama desabotonandola, sacó uno de sus senos y comenzó a alimentar a Alejandrito

la impresión, esos senos solo eran suyos y de su bebé, en qué momento Camill estaba alimentando al hijo de su ex novio, tu hijo necesita a su madre Rodrigo,

visto que Silvia lo

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