El despertar del Dragón

Mientras tanto, Sion se reía con suficiencia.

—¡No puedes correr, Jaime! ¡Te cortaré la cabeza y la colgaré en las puertas de la Alianza de Guerreros! Eso les dirá a todos que no deben ir contra nosotros.

Jaime ignoró a Sion. En su lugar, su mirada se fijó en Diego, y un largo rato después, sonrió.

La escena dejó perplejo a Diego.

—¿Estás sonriendo? ¿Incluso al borde de la muerte?

—Oh, pero ¿quién dijo que iba a morir? No puedes matarme con esa habilidad tuya. Vi a través de ella, y puedo romperla —dijo Jaime con calma.

—¿Y qué si viste a través de ella? En realidad, no puedes romper mi hechizo —Diego no creía que Jaime fuera tan poderoso.

sí? ¿Quieres intentarlo? —Un destello de luz dorada apareció en los ojos de Jaime, y ondas de sentido espiritual

físicos se reflejan en mí, ¿qué hay de los ataques de sentido espiritual? Cortaré su energía mental y evitaré

mental, ¿eh? Te estás sobreestimando. Es imposible que tu energía sea mayor

era para tanto. No creía que nadie fuera más poderoso que él en la magia. Cualquier maestro en magia tendría una gran energía mental. Eso era un hecho, así que Diego no temía en absoluto el ataque de Jaime. De hecho,

Diego y cargó contra su cerebro. En el momento en que su sentido espiritual se infiltró en el cerebro de Diego, una luz dorada

una mueca,

es todo? Demasiado déb... —Esa frase no llegó a terminarse,

cantidad abrumadora de energía mental, como si un tsunami se abatiera sobre él. La energía furiosa le desplomó el cerebro. Intentó defenderse con todas sus fuerzas, pero su energía

al aturdido Diego y sonrió. Si Diego no hubiera subestimado su poder, habría sido una molestia infiltrarse en la

lanzó un puñetazo. Sin embargo, Diego no parecía haberse dado cuenta de su presencia, ya que estaba aturdido. A medida que pasaban los segundos,

ver tal escena,