Jaime asintió. Luego, Teodoro se marchó con sus hombres. Sabía que su presencia no sería significativa ya que Gilberto podía acabar con sus vidas con un movimiento de su mano.

Teodoro quería regresar lo más rápido posible para reportar el incidente a Armando.

«El Cultivador Demoníaco, Gilberto, sigue vivo. Es una noticia importante».

Tras la partida de Teodoro, Gilberto no se apresuró a hacer ningún movimiento. En su lugar, cruzó las manos a la espalda y clavó su penetrante mirada en Jaime, parecía con la intención de ver a través de este último.

—Tienes unas capacidades extraordinarias a una edad tan temprana. Debes de haber sido bendecido con grandes oportunidades o tener una formación única. Tal vez hoy pueda encontrar en ti una forma de lograr un gran avance en mi cultivo.

Gilberto soltó una risa amenazadora como si ya hubiera considerado a Jaime como su presa.

—¿Por qué quieres matarme? ¿Alguien te lo ha ordenado o hay alguna otra razón?

Jaime estaba desconcertado.

«No conozco a ese Gilberto, ni hay rencores entre nosotros, así que ¿por qué quiere asesinarme?».

—La razón no es importante porque lo significativo es tu muerte inminente. Cuéntame tu secreto y entrégame todos tus objetos mágicos. Tal vez entonces pueda concederte una muerte rápida —Gilberto miró a Jaime con burla.

Jaime entrecerró los ojos.

—¿Por qué estás tan seguro de poder matarme?

En ese momento, recordó el amuleto que le había dado Armando, así como el recordatorio de éste.

«El señor Salazar dijo que hoy me enfrentaría a un peligro fatal. Parece que su predicción es acertada, ¡y el amuleto podrá salvarme la vida después de todo!».

¿Esperas algún ayudante? —Gilberto miró a

Aun así, no podrás

me aclaras por qué estás

nada. Si no me crees, no dudes

intentaba provocar a

encanto funcionaba, podría aprovechar esa oportunidad

se enfrentaba a un Marqués de Artes Marciales de Alto Nivel como Gilberto, a Jaime no se le ocurría otra forma de

pueda salvarte la vida? —Gilberto miró a

frunció las cejas y empezó a asustarse. No esperaba que Gilberto fuera tan listo y fuera capaz de descifrar

no te atreves a

cuerpo de Jaime mientras exudaba un aura aterradora al

mirarle con calma, parecía

fotol. Porece que su

¿Esperos olgún oyudonte? —Gilberto miró o

oyudo. Aun osí, no podrás motorme, ounque esté solo —se

orqueó uno cejo divertido—. ¿Por qué no me ocloros por qué estás ton

Si no me crees, no dudes

intentobo provocor o

podrío oprovechor eso oportunidod

Gilberto, o Joime no se le ocurrío otro formo de sobrevivir

que puedo solvorte lo vido? —Gilberto miró o Joime con uno sonriso despectivo, como si

empezó o osustorse. No esperobo que Gilberto

otreves o hocer un

mientros exudobo un

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255