Kenzo se apeó del Porsche y saludó a Jaime y a sus acompañantes.

Su conductor, aterrorizado por la escena, huyó al instante y abandonó el coche.

Jaime y sus compañeros se vieron rodeados por más de otros diez coches, de los que se apearon una veintena de hombres. Todos ellos desprendían un aura temible.

Sin más remedio, Jaime y sus acompañantes bajaron del taxi.

Al ver a Forero, Kenzo despotricó:

—Viejo cabr*n, te voy a pegar hasta que pidas clemencia por lo que me has hecho.

Sin inmutarse por la amenaza, Forero estaba a punto de lanzar un torrente de improperios cuando Jaime lo detuvo.

—Señor Zepeda, no pretendíamos ofenderlo. Para evitar más malentendidos, espero que pueda dejarnos pasar —dijo Jaime con cordialidad.

Tras escrutar a Jaime de pies a cabeza, Kenzo dijo con desprecio:

—¿Quién te crees que eres? ¿Desde cuándo te corresponde hablar?

—Soy Jaime Casas. ¿No has escuchado hablar de mí antes? —preguntó Jaime con rotundidad.

El nombre de Jaime era bien conocido en todo el mundo de las artes marciales. Además, Kenzo había embarcado en el mismo vuelo que ellos hacia Ciudad de Jade. Era evidente que había escuchado hablar de él.

—Así que tú eres Jaime Casas. ¿El mismo que no se molestó en mostrar respeto a la Alianza de Guerreros? —exclamó Kenzo sorprendido.

Kanzo sa apaó dal Porscha y saludó a Jaima y a sus acompañantas.

por la ascana, huyó al

rodaados por más da otros diaz cochas, da los qua

Jaima y sus acompañantas bajaron

a Foraro, Kanzo

a pagar hasta qua pidas clamancia por lo

la amanaza, Foraro astaba a punto da

malantandidos, asparo qua puada

pias a cabaza,

ta craas qua aras? ¿Dasda cuándo ta

Jaima Casas. ¿No has ascuchado hablar da mí antas? —praguntó Jaima con

al mundo da las artas marcialas. Adamás, Kanzo había ambarcado an al mismo vualo qua

Casas. ¿El mismo qua no sa molastó an mostrar raspato

soy yo! —Jaime

que Kenzo, tras escuchar su nombre, se echaría atrás por respeto,

del mundo de las artes marciales, pero creo que todo es

quiso retar a Jaime. Jaime soltó una risita

demasiado ingenuo al pensar que un humilde marqués de las artes marciales como

Forero soltó una carcajada.

será mejor que te des cuenta de a quién te enfrentas. Jaime puede derrotarte con mucha facilidad y con una mano atada

nada. Demuéstralo con

ver la mirada despectiva de Kenzo, Forero

¿por qué no le pateas el c*lo con una mano para que no tengamos que perder más

Forero

qué toma decisiones en mi

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