—Jaime, nos volvemos a encontrar —se mofó Saulo con malicia mientras miraba a Jaime.

—¿Saulo?

Jaime se quedó de piedra, nunca esperó que fuera Saulo quien apareciera.

Al principio pensó que iría Patricio. Desde luego, no esperaba que Saulo estuviera allí. Aquella observación le causó un asombro total.

—Así es. Soy yo. Sorprendido, ¿verdad? Has trabajado tanto para conseguir este Tubérculo de flor de lana de diez mil años, pero ahora es mío.

Saulo exhibió el Tubérculo de flor de lana ante Jaime. Luego alargó la mano para agarrarle del hombro.

—Ahora, no sólo es mío este Tubérculo de flor de lana, sino que también te llevo conmigo.

Saulo pensó que Jaime había perdido su poder, así que trató de agarrarlo despreocupado.

Sin embargo, los ojos de Jaime brillaron en ese momento. Estiró la mano, agarró la muñeca de Saulo y luego le arrebató el Tubérculo de flor de lana de diez mil años. Después, golpeó el pecho de Saulo con todas sus fuerzas.

Sorprendido, Saulo salió despedido, estrellándose contra la pared y dejando un enorme agujero.

Atónito, Saulo se puso en pie y miró a Jaime.

poderes no

que envenenándome podrías hacer desaparecer mi poder? —dijo

cara de

Menuda bola de

serviría de nada en aquel momento. No le quedaba más

y Vladimir, que

Vámonos —dijo

podrían luchar si se enfrentaran solos a Jaime, pero ahora que el refuerzo

tras percibir el

familiar hace un momento.

jorobado? —Saulo parecía

que Jaime se había enfrentado antes a Malphas cuando éste residía en

gastar saliva con ellos. Vámonos

envolvieron su cuerpo. Al

vio aquello. No

No eres el único con un físico

cuerpo de Saulo se desvaneció en el aire mientras soltaba

puedes escapar confiando en una simple magia

cuerda brillante se materializó en su

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