Capítulo 151

Beatriz hoy estaba algo ebria. Ya era suficiente que un cóctel en ese lugar costara 128.8 dólares, pero encima era homble. Esther, con la intención de impresionar a un joven guapo que le gustaba, ordenó más de treinta cócteles y abrió dos botellas de vino muy caras.

Esther, que iba a manejar, no habia bebido, asi que llevó a Beatriz hasta la puerta de su casa.

-Acabo de ver un mensaje en un grupo, Bea, ¿hoy te encontraste con Mauricio y Tomás? -Esther funció el ceño preocupada-, Bea, sé que olvidar a Mauricio no es fácil y aunque pareces fuerte, tu corazón ya está sangrando. Beatriz

Honestamente, ese comentario de Esther hizo que Beatriz quisiera vomitar aún más.

¿Casas, autos, diamantes, dinero, qué no es más atractivo que Mauricio?

Si Beatriz sangraba por el corazón, definitivamente seria por falta de dinero, no por Mauricio.

Queria darle una palmada en el hombro a Esther y decirle que dejara de hablar de esa manera tan melodramática, pero su cabeza estaba mareada

En ese momento, apareció el mayordomo Gabriel

-Señora–dijo Gabriel.

Esther le pidió a Gabriel que cuidara de Beatriz.

ha bebido demasiado y está de mal humor, por

Gabriel sonrio cortesmente.

de la señora, ¿le gustaria entrar y

es tarde, tengo que ime a casa -Esther estaba preocupada por Beatriz, lamentando haber ido a ese lugar y

hacia el interior de la casa,

mucha consideración,

está triste por ese galán otra

Beatriz:”

Genial,

todos, ella era la rival malvada obsesionada con

Gabriel, no

-Disculpe–respondió Gabriel.

aquí, seguramente se burlaria de mi igual que

de empresario ascético que no

frágil de alta sociedad con todos los clichés posibles, pudo capturar su

Las

obstáculo para la expansión

se obsesionaba con el protagonista, más

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se quedo dormida en el sofá mientras

con la leche caliente, Gabriel se preguntaba si debería

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