Capítulo 46

Todos los altos ejecutivos estaban tan nerviosos que ni respiraban fuerte, tensos como cuerdas de guitarra, concentrando toda su atención en revisar una y otra vez los informes de sus departamentos que iban a presentar. Cualquier pequeño problema podría esconder un gran desafío.

Ese viernes, el joven director de Los Terrén y nuevo CEO del grupo, comenzaría a trabajar oficialmente, por ende todos los departamentos tendrían que presentar sus informes en esa reunión. Hasta ahora, la reunión había durado dos horas y todos los jefes estaban sudando a mares, con sus trajes empapados.

El hombre sentado en el lugar principal era muy joven, ¡pero su presencia era realmente abrumadora!

El gerente del Departamento de Administración ya había terminado su informe y estaba de pie, esperando nervioso la evaluación y posibles preguntas del presidente.

Entonces, una mirada indiferente hizo que toda la sala de conferencias se sintiera fría y después de esperar lo que parecieron horas para los altos ejecutivos, aunque en realidad fueron solo unos minutos, David no decía nada.

La sala de conferencias se volvió completamente silenciosa y las piernas del gerente del Departamento de Administración que estaba de pie al frente comenzaron

a temblar. Dirigió una mirada suplicante a José, quien estaba sentado al lado de David.

José mordió suavemente su labio y se levantó para acercarse a David, recordándole en voz baja.

“Señor…”

y José se

mirada desconcertada en los ojos de

Sr. Hugo

frunció el ceño, hojeó los documentos del Departamento de Administración en sus manos y

Respecto al problema de los gastos ejecutivos de la empresa, espero que el Departamento de Gestión

Sr. Hugo que se retirara, ni pidió que el siguiente departamento continuara con la presentación.

gérente del Departamento de Administración no sabia qué hacer. Después de un rato,

veían. Levantó su mano ligeramente y la llamó

inclinó la cabeza, su rostro atractivo

José y sus ojos

era el David que

se acercó de inmediato y preguntó, “¿Hay algo que necesite,

en su oído: “¿Cómo está ella?”

boquiabierto. ¿Cómo estaba

difíciles de comprender, pero al haber sido su secretario durante tantos años, ¿cómo podría no entenderlo? José no reaccionó de inmediato, así que no respondió.

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255