Capitulo 1880

Olvia coabend que la cuerda estaba ben atada, impio la via que le confia por la cara, “¿Qué pasa conmigo? Eres una bendición del city si te pasa ako. Ganda va a querer despellejarme viva (No puedo permitir que mueraal

Also Olvasni un escalofrio reconer su cuerpo, a pesar de la situación podia sentir el frio en su corazón.

Tover advante siguem detrás

Opina and reeds veces Claro, clarol

Aro la cuerda atada a su cintura y a través del velo de lluvia vio hacia la cumbre de la montaña.

aya

Solo cuando confirmó que la cuerda estaba segura en sus manos, se sintió aliviada.

Comparado con el miedo inicial se sentia mucho más relajada ahora.

Una simple cuerda y habla un mundo de diferencia en su estado mental

Pero fue precisamente ese cambio el que dejó el accidente suceder tan inesperadamente.

Al sentirse más confiada, Celina empezó a moverse con menos cuidado.

Además, no queria trepar por si misma y Olivia tuvo que acercarse.

Así que ambas estaban cerca de la copa del árbol.

El moviment de Celina hizo que la rama comenzara a temblar violentamente.

El rostro de Olivia se puso pálido y aterrándose a la rama, gritó: “¡No te muevas!”

El viento arreció, llevando consigo más lluvia y sacudiendo las ramas aún más fuerte.

Olivia…

Celina vio que el cuerpo de Olivia se sacudia violentamente y sabiendo que ella tenía una cuerda, extendió una mano para agarraria.

Pero en un instante también perdió el equilibrio y lanzó un grito agudo.

Los que sostenian la cuerda sintieron un tirón y por instinto, se aferraron con fuerza.

La rama quebró con un crujido.

Cuando finalmente lograron tirar de la cuerda y rescatar a la persona en el otro extremo, solo encontraron a Celina, casi paralizada por el miedo.

Mirando alrededor, la rama rota colgaba todavia alli, pero no había señal alguna de Olivia.

Félix sintió un zumbido en su cabeza, tambaleándose, gritó desgarradoramente: “¡Señorita!”

El grito de Félix sacudió a Celina, quien se recuperó y miró alrededor. Bajo la lluvia, no había nada.

Habian rezado para que no sucediera un accidente.

Pero el temor se había hecho realidad.

Rápido! ¡Bajen a buscar ayuda!”

*S*

“Si si

estaban en

de que ese método era la mejor solución bajo esas circunstancias, habían permitido que una joven arriesgara su

chica, sino que tampoco sabrían cómo explicarlo a sus

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Capitulo 1889

oscuridad se había

lluvia se

sonido del viento llevando la lluvia era especialmente claro, vacío como un

estaba pálida y congelada en

cabello, camino de un lado a otro y finalmente, con voz severa, dijo: “Mario, lleva a esta niña montaña abajo,

sentó, apoyándose en sus manos detrás de

“Oigan!”

les suplico, encuentren a la señorita!”

parecia estar utilizando toda

de hablar, suspiró profundamente y bajó un poco más.

Ava, preocupada, se puso un impermeable y tomó una linterna,

Celina, se detuvo y se hizo a un lado del camino, bajando

oy

de la persona que llevaba a Celina la intimidó.

se marcharon rápidamente, ella continuó subiendo

la linterna alrededor, observando la cuerda en el suelo y la rama rota en el borde del

en el rostro pálido de Celina, apretó la linterna con

había tenido un accidente.

se dio la vuelta y corrió montaña abajo.

vuelta a la enfermería del orfanato y una vez que la dejaron cómoda en

a la directora estaba Ginés, con una venda alrededor

calma por completo, se

cabello ya estaba seco y las

Ginés, las lágrimas que había estado conteniendo

“Ginés.”

el ceño al ver los moretones en su

hombre te golpeó?”

Celina sintió una ola de angustia abrumadora.

aumentaron en

persona… tenía tanto miedo…

se entremezclaban con el llanto, intentando

dolor a Ginés.

tratando de mantener la calma en

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Capitulo 1889

que se llevaron a esa persona. Necesitaremos esperar a que la policía termine su investigación para

secarse las lágrimas y al tocar una de

la cama y le

peor, el hecho de que hayas podido

respondiendo con un

directora le acarició la cabeza. “¿Crees que podrías contarle a la policía lo que te pasó? Empieza por cómo te capturaron, intenta recordar todos los detalles, eso ayudaría mucho en la

chica parpadeó, encogiéndose un poco por

evidente que el trauma había sido demasiado grande, el miedo demasiado profundo, hasta el punto de no querer ni siquiera pensar

muy alterada, ya que han capturado al hombre, ¿podría descansar y recuperarse

policía lo miró, apretó los labios y dijo: “Ella puede descansar, yo esperaré afuera hasta que

Ginés preguntó: “¿Tiene que ser

y suspiró, “No tiene que ser hoy, podría ser mañana o pasado, pero eso

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