Capítulo 18

cho años después, la familia Muñoz había añadido una princesita a la familia.

Javier había hecho el largo viaje desde Ciudad Real para volver, asistir al festejo del primer mes de la niña, y habian intercambiado simbolos de su compromiso.

Asi se forjaron los lazos matrimoniales entre ambas familias.

Yolanda tomó la palabra en el momento justo, “Señora, apenas tengo dieciocho años y por ahora no quiero pensar en esas cosas de la vida. Además, ustedes, loš Zesati, son de una familia bien acomodada, como voy a estar a la altura de un señor Zesati con esta figura tan flaquita como la mia?” La abuela Zesati ni se lo tomo a pecho y miró a Yolanda con una sonrisa, “¡Claro que si! ¡Una muchacha tan atractiva como tú, como no va a estar a la altura! Tranquila, que si ya se arregló el compromiso, nosotros los Zesati cumplimos con nuestra palabra y me encargaré de que Sebastián te lleve al altar.”

Al escucharr esto, el rostro de Yolanda cambió de color.

¡Esta vieja era un caso perdido en cuanto a tacto!

Ni siquiera se daba cuenta de que estaba hablando en serio.

¡Como si Basti pudiera estar a su nivel!

La hacen ver como si estuviera ella trepando por encima de su posición.

¡Qué va!

¡Qué cosa más fea!

Realmente daba asco.

también parecian sentirse un poco

la abuela

tenía ni un poco de autoconciencia?

estaba bien en las expresiones de los Muñoz y de Yolanda, y luego miró a la abuela

se

expresión en

quiere decir mi madre es que venimos a arreglar lo de los chicos, ya que han crecido bastante, mejor dejar todo

algo muy importante para mi, mis padres no pueden decidir por mi,” continuó Yolanda, “No hay necesidad de complicarles la vida a mi papá y a mi mamá. Ya que han venido hoy, mejor aclaro las cosas de una vez. Solo quiero concentrarme en mis estudios y no desviarme pensando en otras cosas. Así que, creo que lo mejor es que anulemos este compromiso matrimonial, ya no estamos en

escuchar esto, Eva se quedó boquiabierta.

Zesati también.

14:02

Capitulo

la miraban fijamente a

segura do que el señor Zesati encontrará

que podian aspirar a algo

sabe medir sus palabras, si ha dicho algo que

David continuo, “Yoli es mi única hija y a veces es demasiado consentida, ni le hagan caso, iyo no puedo controlarla! Si la niña no quiere, nosotros como padres tampoco podemos obligarla a hacerlo… Como dice el dicho, el melón forzado no es dulce, mejor dejemos el compromiso

juego de niños, nuestras familias se han conocido por años y además, Javier, antes de morir, nos

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255