La Heredera del Poder

Capitulo 348

Gabriela nunca fue de las que buscon llamar la atención

Sin embargo, Yolanda insistia en no dejarla en paz, obligándola a convertirse en el blanco de todos. Pues bien, Gabriela pugaría el juego de Yolandal

Le mostrarla lo que significaba ser un verdadero maestrol

La infantil caligrafia de Yolanda nunca había sido una amenaza para Gabriela,

Al escucharla, Yolanda se sorprendió,

no esperaba que Gabriela de repente aceptara el reto.

a salvar un poco de su dignidad.

Penso que Gabriela quizá solo estaba luchando para

Después de todo, habla crecido a la familia Muñoz y habla recibido la mejor educación, pero terminó siendo conocida por todos como un fracaso

Mientras que Yolanda, que vivió en los barrios más pobres, aun así sobresalial y dejaba a Gabriela atrás por millas.

Con ese pensamiento, Yolanda sonrió satisfecha, sintiéndose extremadamente complacida,

Nerea observó a Gabriela con burla en sus ojos y dijo, “Todo Capital Nube conoce la reputación de la Srta. Yllescas. Si no tienen la habilidad, Srta Yllescas, mejor no se esfuerces y asi no pierde el tiempo de todos”.

¡Una persona que ni siquiera podia sostener un lápiz correctamente se atrevía a competir en caligrafia con Yolanda!

¡Qué falta de autocritical

“Escuchar puede resultar engañoso, ver es creer, la Srta. Jaso viene de una familia distinguida, ¿cómo es posible que no entienda algo tan sencillo?” Dicho eso, Gabriela levantó ligeramente su mirada hacia Roberto y dijo, “Por favor, Sr. Arrufat, seria tan amable de conseguirme otra plumma“.

de inmediato mandó a preparar la pluma.

llego con la

pluma, se acercó a la mesa y con una pluma en

de cabello travieso cala juguetonamente alrededor de su rostro, añadiendo un toque

ver ese

gente se sorprendió

está intentando hacer?”

mismo tiempo para escribir?”

de hacerlo,

un espectáculo! ¡Está solo

siquiera podía reconocer todas las letras antiguas,

reconocidos no podrían lograr

observaba a

sus ojos

demás, no creia

ver cómo Gabriela iba a terminar

reputación de Gabriela ya estaba lo suficientemente

sin importar

y Nerea, sino también los demás esperaban ver

el momento vergonzoso de Gabriela y compartirlo en sus

la tinta lista, se enderezo ligeramente y comenzó a escribir con ambas manos, la pluma tocando el papel de arroz Sus movimientos eran fluidos

papeles de arroz a ambos lados: Ocultar el ingenio en la torpeza y

precisos y poseían una fuerza vigorosa

linea de texto tenia su propio estilo distinto.

décadas de práctica bajo la supervisión de un maestro, eran imposibles de plasmarlas, y

con esas dos obras, sus letras parecian las de un estudiante de primaria

había comparación