La Novia Equivocada Novela de Day Torres
Capítulo 191
ATRACCIÓN PELIGROSA. CAPÍTULO 40. Díganse adiós de una vez
Aaron miró aquellos documentos por centésima vez en la madrugada. Ni siquiera quería leerlos a saber qué demandaba Nahia, sabia que obtener su libertad era lo único que podía interesarle de él.
-Agárrala con la otra mano, que con la fuerza que traes en esa vas a hacerla estallar en pedazos -rio una voz tras él y Aaron se giró para ver a Katerina, que llegaba a la terraza de su habitación, señalando la botella que había estado a punto de llevarse a los labios-. Ya sé que eres un hombre de las cavernas, pero ¿no tienes un vaso en el que brindarle a tu abuela?
Aaron respiró profundamente, alcanzó un par de vasos pequeños en su minibar y sirvió el vodka mientras Katerina se sentaba.
-Ya lo sabes… -murmuró.
-Yo siempre lo sé todo -sonrió Katerina con una sonrisa-. A estas alturas es raro que te sorprenda. -Vino a traer los papeles del divorcio -murmuró Aaron sentándose a su lado y mirando a la noche. -Bueno, tu madre hizo lo que pudo para retrasarte el momento, pero debo reconocer que además de especialista en cagarla, además eres muy lento, hijo -gruñó Katerina con impaciencia.
Aaron frunció el ceño y miró a su abuela sin comprender a qué se refería.
-¿De qué hablas? Nahia me dijo que mi madre le llevó unos papeles de divorcio hace dos años para que los firmara… ¡ella pensaba que estábamos divorciados hacía dos años! -exclamó confundido.
-¡Exacto! ¡Y como Nahia creía que estaba divorciada no se ocupó de hacerlo ella misma antes! ¡Pero ya pasaron dos malditos años y tú no reaccionaste! ¡¿Qué diablos esperabas que pasara?! -lo increpó Katerina para luego bajar el trago y volver a servirse con frustración.
Aaron se pasó las dos manos por la cabeza, una con más fuerza que otra y se mesó los cabellos.
-No lo sé… -murmuró con un nudo en la garganta-, No lo sé. Pero igual no había mucho que hacer ¿
verdad?
-¡Pues pedir perdón no te hubiera matado! -le espetó Katerina y a su nieto se le escapó una sonrisa
triste.
-¿Pedirle perdón, en serio? -murmuró-. Eso sería demasiada arrogancia de mi parte. ¿Crees que va a perdonarme después de todo lo que le dije, después de todo lo que le hice…?
-¡Pero estás arrepentido! ¿No?
-¿Y eso de qué sirve? -murmuró Aaron-. Ella tenía razón, siempre fui un animal cuando estaba herido, eso jamás cambió desde que era un niño, y mi primer instinto siempre es lastimar. -Sus ojos se humedecieron y respiró profundo mientras intentaba contener las lágrimas-. Siempre supe que acabaria lastimando a alguien que amaba… pero honestamente no pensé que fuera a ella.
Katerina lo miró con tristeza. Aaron jamás había vuelto a ser feliz desde que había perdido aquella mano, pero los dos sabían que la mano era lo menos importante que había perdido ese día.
-Es una pena -murmuró-. Tienes la brutalidad de tu padre, pero no puedo creer que no heredaras su perseverancia. ¡Si de verdad la amaras ya estarías haciendo el camino de aquí a Inglaterra de rodillas aunque te tuvieran que poner prótesis en las patas también!
Aaron le sonrió con angustia, porque ya no había nada que pudiera hacer o decir para redimirse.
una hija -susurró y Katerina lo
1/4
adivinar… no tuviste tanta suerte -le dijo.
y negó con la cabeza.
que había estado matándolo lentamente-. Hizo lo que era mejor para ella, siguió adelante -murmuró-. ¿Sabes? Le dije
recibió una palmada en la nuca que se pasó de fuerte y lo hizo bajar la cabeza de
a una santa como yo! ¿Por qué mejor no dejas de autocompadecerte
intento!
durante un segundo su corazón aleteó
si no los firmo?
el proceso más lento -replicó Katerina-. Supongo que dependerá de cuánto tarde en salir tu acta de defunción, porque algo si te
- no.
pero no servía de nada porque no había sabido demostrárselo. Nahia le había salvado la vida… y él la había abandonado por eso,
echado de su lado, Aaron había perdido el camino de regreso y lo sabía. No importaba que se estuviera muriendo por ella, ni siquiera
de los papeles y firmó sobre cada etiqueta.
llegar, por
los ojos en blanco y se
que te confundiste, cariño, a mí me llaman la Titiritera, no la Mensajera -le dijo. Ve a darle el
silencio y sobra decir que no logró dormir en toda la noche. No dejaba de pensar en Nahia, no había querido verla más, ni saber de ella, ni buscarla, porque estaba seguro de que tarde of temprano terminaría lastimándola
quedó más remedio que
recepción le dieron su número de habitación y unos minutos después Aaron se encontró frente a aquella puerta. Tocó un
allí, solo que le dejara los papeles en
él en
ella extendiendo la mano para
y verificando que no faltara ninguna firma. Cuando se giró él estaba adentro y había cerrado
particular en la voz-. Te enviaré la sentencia de
en movimiento, así que en un par
seguía siendo tan natural y espontánea como siempre y
-confesó Aaron y
-¿Disculpa? -murmuró ella.
quería firmar el divorcio -repitió Aaron-. Pero supongo… creo que no hay
hacer.
aquellas palabras no
que es algo que debimos resolver hace mucho -respondió encogiéndose
saliva y apretó los labios mientras negaba-. Sé que te lo dije muchas veces…
Leer La Novia Equivocada Novela de Day Torres Capítulo 191 Leer La Novia Equivocada Novela de Day Torres novel Capítulo 191 La lectura La Novia Equivocada Novela de Day Torres de Day Torres ha sido actualizada al capítulo Capítulo 191 . En Capítulo 191 de la serie La Novia Equivocada Novela de Day Torres, Nathan King es el hombre más poderoso y rico de la ciudad. Su riqueza hace que ya no crea que las mujeres acuden a él por amor, hasta que conoce a Amelie, una chica pobre. El destino los ha emparejado, pero ¿se juntarán?... ¿Este $capítuloTítulo autor $autorNombre menciona algún detalle? Siga Capítulo 191 y los últimos episodios de esta serie en Novelxo.com. La Novia Equivocada Novela de Day Torres Capítulo 191 La Novia Equivocada Novela de Day Torres novel Capítulo 191