Capítulo248

Pol se quedó atónito por un momento y su corazón se apretó.

Clara tema las mejillas moradas de la ira tan grande que sentía en aquel momento, clavando su mirada furiosa en los ojos oscuros de Alejandro. -¡Alejandro! ¿Cómo puedes ser tan desvergonzado y actuar como si tu comportamiento tuviese alguna justificación posible? ¡Sueltame… ¡No iré contigo, aunque me lo pidas de rodillas!

No importaba cuánto luchara y maldijera, para Alejandro, parecía que no había nadie más en este mundo que le importara. En ese momento, su única intención era llevársela con él.

Verla compartiendo una habitación con un extraño, completamente borracha, sin ningún sentido de vergüenza, hizo que Alejandro mordiera sus dientes con fuerza. No podía soportarlo más.

-Alejandro, ¡De veras que no eres más que un bastardo… suéltame…ya!-Sin previo aviso, este hombre de gran energía la levantó sobre su hombro, sujetando su cintura con sus fuertes brazos y se fue caminando con un rostro frío como el jade.

-¡Bájame… Ugh… voy a vomitar! -Clara golpeaba con fuerza su espalda, sintiendo que su

estómago se revolvia y también estaba a punto de llorar.

-Si quieres vomitar, adelante, vomita todo lo que quieras. -Alejandro no mostró ninguna empatía

en su mirada.

Si vomitaba, estaría bien, sería igualmente un castigo para ella. ¡Esta pequeña estafadora sin

conciencia!

de la habitación, los finos labios de Pol

rubicundo.

ilegítimo sin ningún tipo de moralidad ni

hacer ahora? ¿Deberíamos

preocupación.

y clara de Pol

agua que Clara había

sus dedos.

Alejandro se casó–dijo Pol con sorpresa, pero sus ojos

1/2

lo que ha hecho Alejandro en estos años,

actual con ella.

había planeado llevar a Clara de vuelta a su propia habitación, pero al pensar en que Rodrigo estaba durmiendo allí, decidió llevarla

camareros y clientes vieron la escena emocionante, pero nadie se

ada… quiero vomitar…Después de tomar una pastilla para el dolor de cabeza, Clara se sintió un poco mejor, pero ahora se sentía mareada y con náuseas, como si estuviera en un barco balanceándose. Su voz suave hizo que el corazón de

cambio, una sensación de calidez se extendió por su pecho, y su garganta se movió. Clara, si hubiera sabido esto, no habría sucedido lo que sucedió

cuando acababa de bajar a la señorita,

pequeño rostro sonrojado y presionando sus dedos de

lentamente.

Al siguiente momento…

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255