Mi Frío Exmarido

Capítulo 273

Dorian cruzó y entró a la oficina.

Yael tampoco se atrevía a preguntar más, así que contactó al agente inmobiliario en línea, le pasó sus requisitos y se sumergió en el ajetreo del trabajo.

Cuando se acercaba el mediodía, el agente ya había encontrado algunas opciones de vivienda que coincidían con lo que buscaban y habian acordado una cita para verlas.

Yael no estaba seguro si Dorian quería ir a verlas personalmente o si le encargaría esa tarea, así que no se atrevió a decidir por él.

Giró su cabeza para mirar hacia la oficina de su jefe, quien estaba ocupado.

Se acercó y tocó a la puerta, tras un “adelante” entró y le mostró la pantalla de su teléfono a Dorian.

“Sr. Ferrer, el agente nos ha enviado un par de opciones, écheles un vistazo a ver si alguna le parece adecuada.”

Dijo mientras giraba la pantalla hacia él.

Dorian echó un vistazo, en la pantalla aparecían fotos de dos propiedades, ambas con una decoración sencilla y elegante, al estilo europeo moderno.

“¿En qué edificios están?”

Preguntó.

Yael respondió: “Una en el edificio 11 y la otra en el 3.”

Al mencionar “el edificio 3”, vio cómo los oscuros ojos de Dorian se movían ligeramente.

“El agente pregunta si le viene bien verlas esta noche. Podemos ir después del trabajo.”

Dorian asintió: “Entonces quedamos para esta noche.”

Luego devolvió el teléfono a Yael y mientras retiraba la mirada, echó un vistazo al reloj de la computadora: eran casi las doce.

en silencio un momento y luego tomó

llamada fue respondida después de unos breves

“¿Sigues ocupada?” Preguntó.

voz suave y baja hizo que Yael

siendo

sostenía el teléfono con una

Yael lo miraba, le lanzó

rápidamente recogió sus cosas y se fue, pero no sin antes recordarle: “Sr. Ferrer,

comer.”

“Tú ve primero.”

de nuevo en

al otro lado del teléfono era cortés y distante como siempre:

“¿Vamos a

lado: “Ya bajé con mis

silencio un momento y

punto de salir,

colgado el teléfono, que descansaba casualmente en su mano, con los párpados medio cerrados y una

pudo evitar llamarlo: “¿Sr.

se levantó y

calmada, pero emanaba una sensación de distancia, no de

Yael, que habia estado a su lado durante años, optó conscientemente por el silencio, sin atreverse

10.00

demasiado ruidoso.

la larga fila que se habia formado y al ver a Amelia en la fila, SU mirada

con Dalia, Rafael, Héctor, Rufino y Fabiana, entre otros

Amelia también lo vio.

porque él había mencionado esa mañana que comerían juntos al mediodía y ella no lo había esperado, al ver que Dorian la miraba, sintió un atisbo de culpa y desvió la

se puso al final de la fila y esperó

empresa, rara vez hacía uso de su posición en

y abundantes, por