Receta para robarle el corazón al Dr. Farel

En una habitación del piso superior, la luz se encendió.

Evrie se apoyó en la ventana, mirando a través de la pequeña abertura de las gruesas cortinas hacia las sombras de la calle.

El farol de la calle emitía una luz amarillenta, estirando su sombra hasta confundirse con la oscuridad de la noche.

Evrie observaba en silencio, sintiendo su pecho apretado como si estuviera lleno de algodón, cada inhalación y exhalación era un ahogo.

No sabía cuánto tiempo había pasado, pero él seguía ahí sin moverse.

Evrie se mantuvo apoyada contra la ventana, tanto que sus piernas comenzaron a entumecerse.

Al mover sus pies, tocó las cortinas haciendo que se movieran un poco.

El hombre abajo levantó la vista por un instante.

Evrie rápidamente se escondió detrás de las cortinas, cubriéndose completamente.

La noche era fresca y húmeda, y en la sala, Blanca estaba buscando el pronóstico del tiempo. El sonido del video se colaba en la habitación.

Anunciaban un gran descenso de temperatura para mañana, con vientos fuertes por la noche.

Evrie caminó hacia la puerta y apagó la luz sin hacer ruido.

La habitación quedó sumida en la oscuridad.

Ella volvió a espiar a través de la abertura de la cortina.

Después de unos minutos más, el hombre de abajo finalmente apagó su cigarrillo y entró a su auto.

Pronto, el carro se alejó.

El lugar que había ocupado quedó vacío y desolado.

En la oscuridad, Evrie se fue agachando lentamente, su espalda contra la ventana, con los ojos rojos y llenos de lágrimas.

…

casa

estacionó su carro en el garaje y subió al ascensor como quien conoce su camino,

un patio

se habían mudado, solo su padre, Amir, seguía viviendo allí, esforzándose por mantener

se escuchaba a Amir hablando por

se oyó más la voz de su padre. Entonces, con

frente a su escritorio, practicando caligrafía y no levantó la vista

acostumbrado a este

apruebes esto, firma

de documentos sobre la mesa, con un tono

al nombre en

—¿El proyecto de GCES?—

—Sí.—

cuándo estás involucrado

un lado, con una expresión de desagrado—¿Así

no firmas, te denunciaré por ser un vago y

siempre había ignorado

curioso por su

chico siempre detestaba hacer favores, especialmente

vez, algo no

la mesa y preguntó—¿Quién te pidió

desdén y levantó la barbilla—Mi novia, la debes conocer. Se llama Evrie, es la chica a la que casi arruinas en tu estudio la otra

tono estaba lleno de desafío

a

es la mujer de Farel?

con respeto. Ahora es mi novia, y no tiene

el escritorio y

mantente lejos. Si te atreves a ponerle un

estas palabras, Amir soltó una risa