Capítulo 35

-¿Qué pasó?

La que se había atragantado con una espina de pescado era ella, había gritado y llorado tanto, ¿por qué él reaccionaba de esa manera? Esa cara roja como tomate, le recordaba un poco a aquel día

pero, en el Gran Torneo de Piedras Preciosas, cuando lo ayudó a aplicarse la Loción Regeneradora para Cicatrices. En aquel momento, se había sonrojado porque ella lo había tocado, pero ahora, ¿por qué se avergonzaría…?

El recuerdo del dolor y los gritos al sacarse la espina volvió a su mente, y Nerea finalmente entendió que sus gritos quizás había sido un poco… sugerente. ¿Sería eso lo que lo habla avergorizado?

¿Tan inocente era? Eso era completamente diferente al hombre que en el Hotel del Rio le había rasgado la ropa de manera feroz y brutal.

¿Cómo puede alguien ser tan bestial después de beber, y tan santo una vez sobrio?

-Tú…

-Voy al baño a deshacerme de esto.

Roman se levantó, y Nerea miró la espina de pescado entre sus dedos, frunciendo el ceño, ¿realmente necesitaba ir al baño para deshacerse de una espina tan pequeña? ¿Y su voz por qué sonaba tan ronca?

-Oh.

no comas más pescado por ahora, yo te ayudaré a

¿Sacar las espinas?

sacar las

de la familia Carris, siempre había sido consentida, pero nunca tanto como para necesitar que alguien le sacara las espinas del pescado. Escuchar algo así de alguien que no

en el Gran Torneo de Piedras Preciosas, hasta el punto de querer regalarle un

-Está bien…

tomó en serio, pero tampoco volvió a tocar ese plato de pescado. Después de un rato, cuando casi había terminado de comer, miró el reloj. Ya habían pasado casi veinte minutos, ¿por qué Roman aún no salía del baño?

en el sofá a

pequeña y acurrucada como un zorrito, durmiendo tranquilamente en un rincón. Su mirada,

el saco y lo colocó sobre ella con cuidado, sus dedos rozaron sin querer su

justo vio a Roman inclinándose ligeramente, oliendo el suave cabello de Nerea, que estaba dormida, ¡su

1/2

completo

¡El jefe

la Srta. Nerea se despierta de repente y lo ve, ¿no se

Mi vida.

se esforzó por controlar sus emociones, soltó el cabello de Nerea y cerró los ojos, pensando que, como siempre, le costaría dormirse, pero acompañado por la respiración suave y uniforme de Nerea

había estado tanto tiempo allí y aún no

a su asiento, miraba su reloj constantemente. Después de casi una hora, no pudo resistir más y se levantó para ir a

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255