Capítulo 74

Óscar, al ver que la usualmente charlatana Ariana parecía estar de mal humor hoy, y aunque también trabaja en el Grupo JK, últimamente la ha visto poco, se preguntó qué le habría pasado a la joven. Decidió preguntarle a Adela otro día.

El coche se detuvo frente a la villa, y esa vez Ariana traía las llaves, así que abrió la puerta y entró directamente.

“Voy a subir a buscar un par de conjuntos de ropa para mi hermano, Óscar, siéntate un momento.”

Ariana llegó a la habitación, abrió el armario, tomó dos conjuntos de ropa cómoda y un par de zapatillas. Buscó una bolsa limpia para empacarlas, pero al girarse, vio ropa negra sobre el pie de la cama, pensando que su hermano la había olvidado allí por estar enfermo, se dispuso a recogerla. Al levantarla, descubrió que era un vestido de noche de mujer y que había sido usado.

Ariana sintió que había descubierto un nuevo mundo. Su hermano se había divorciado de Pilar hacía cuatro años, y ese vestido definitivamente no era de ella. Antes del divorcio, Pilar vivía con él en esa villa, pero después, aunque él siguió viviendo allí, Pilar rara vez venía. De hecho, no estaba muy clara la razón de su divorcio, y después de ese, Pilar desapareció. ¿Estaba pasando algo con su hermano en ese momento? Tomó el vestido y corrió escaleras abajo.

ROSE FOE

“¡Óscar, mira! ¿Qué es esto!?”

Óscar miró a

con un trozo de tela negra en sus manos, luciendo una cara de shock y chismosa, esperando

Óscar hizo una suposición

vestido, de mujer! Lo encontré en la

oír eso, Óscar también se interesó, pero luego pensó y dijo, “No será de Pilar,

nunca ha pasado la noche

segura?”

eso es resultado del chisme entre mujeres, ay, realmente me pregunto quién será la mujer que pasó la noche con mi hermano.”

“Dios mío, tengo una suposición razonable y audaz, ¿será que

no entendía, ¿será que estaba demasiado viejo para no entender

refiero a besos y abrazos, y luego a una serie de

estuviera pensando en eso, y por un momento también se sintió un poco incómodo. Levantó la mano y le dio una palmadita suave en la

el vestido y subió las escaleras murmurando, “¿Jovencita? Si ya tengo 25, algunas personas de mi edad ya son madres.” Óscar, escuchando su murmulto mientras

de empacar, voy

siempre tratándome como a una niña.” No pudo evitar

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