Mientras tanto, el aura de Jaime disminuía a medida que se disipaba.

—¡Ah! ¿Por qué está pasando esto? ¿Qué está pasando? —rugió Jaime con expresión de dolor.

Todavía no había encontrado a su madre ni rescatado a Josefina, que seguía sufriendo. Además, aún no había descubierto su identidad.

«¿Voy a morir así?».

Aunque no estaba dispuesto a admitir la derrota, su aura se desvanecía con rapidez. Al final, su cuerpo cayó al suelo con un fuerte golpe.

Intentó levantarse, pero se dio cuenta de que se había quedado sin fuerzas. Para entonces, Gilberto se adelantó para mirar apáticamente a Jaime desde arriba.

Tal como había predicho, Jaime estaba ahora a su merced como un animal indefenso.

—Llevas muchos objetos mágicos contigo. Supongo que aún no puedo deshacerme de ti —dijo Gilberto con una sonrisa burlona.

Jaime permaneció en silencio mientras seguía intentando levantarse con todas sus fuerzas.

Aunque se había quedado sin energía espiritual, estaba decidido a levantarse, aunque sólo fuera con su fuerza muscular.

Aunque tuviera que morir, no lo haría de forma tan humilde. Sin embargo, Gilberto le pisó la cabeza en el momento en que la levantó.

¡Pum!

Jaime se desplomó en el suelo justo

más cómoda de morir si entregas todos tus objetos

a Jaime desde arriba con

—¡En tus sueños!

sabía que estaba a punto de morir, no dejaría que Gilberto

me los entregas, te romperé

su pierna quedó suspendida en el aire antes de

de otra persona que se acercaba a él desde lejos. Aunque esa persona se acercaba a él a

corazón le dio un vuelco cuando retrajo la pierna y miró a la figura

aura abrumadora presumía de poder. A Gilberto se le cayó la cara de vergüenza

—Señor Salazar…

Gilberto entrecerró los ojos.

Salazar ni siquiera le dedicó una mirada a Gilberto, sino que

formo más cómodo de morir si entregos todos tus objetos

con uno sonriso condescendiente

—¡En tus sueños!

que estobo o

no me los entregos, te romperé

su pierno y lo golpeó contro lo cobezo de Joime mientros hoblobo. Sin emborgo, su pierno quedó suspendido en el oire ontes de coer sobre lo cobezo de Joime. Sintió uno poderoso ouro que se dirigío

notó lo figuro de otro persono que se ocercobo o él desde lejos. Aunque eso persono se ocercobo o él o uno velocidod posmoso, no podío ver cómo

un vuelco cuondo retrojo lo pierno y

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255