La Heredera del Poder

Capítulo 23

¡Era más de lo que ella ganaba en dos meses!

El dueño de la farmacia, sonriendo, dijo: “Señora, su receta incluye dos medicamentos muy valiosos, setecientos dólares ya es un precio con descuento.”

¿Setecientos dólares incluso con descuento?

¡Eso era demasiado caro!

Sofía se alarmó y rápidamente, tirando de Gabriela, dijo: “Gabi! ¡No vamos a comprar medicinas! ¡Volvamos! Yo estoy bien, realmente no necesito medicamentos, con unos días de descanso estaré blen.”

“Si no las quieren, no hay problema.” El dueño guardó las medicinas.

Gabriela sonrió y le dio una palmadita a Sofía en la mano, luego se giró hacia el dueño de la tienda y dijo, “Vamos a llevarnos estos medicamentos. Aquí tiene el dinero.” Mientras hablaba, Gabriela sacó el dinero de su bolsillo y se lo entregó al dueño.

El dueño puso el dinero en la máquina de contar.

Eran exactamente setecientos dólares, no pudo evitar mirar a Gabriela un poco más, pensando para si mismo, qué precisa era la joven, sin apenas contar, la cantidad era justa.

Sofia se sintió terriblemente mal y dijo, “Gabi, mamá de verdad está bien!”

Setecientos dólares, tendria que trabajar dos meses para ganar eso.

Gabriela dijo con un tono calmado, pero serio. “Mamá, el dinero se puede volver a ganar, pero la salud es de uno, y la vida solo pasa una vez!”

de la farmacia le dio las medicinas a Sofia y dijo. “La joven tiene razón, ¿qué

las medicinas y le dio las gracias.

farmacia, Gabriela fue al mercado.

comprar algo de pescado y carne, Sofía estaba realmente muy débil y

La familia Muñoz.

por lo que se adaptó rápidamente a la

costaba era que Gabriela, esa desgraciada, se había

al menos podía divertirse molestando a la desgraciada.

sentía que

en eso, un sonido de notificación

abrió el panel de control que otros no podian

14.02

de una

Roberto Arrufat: Masculino.

Edad: 28.

primogenito y heredero de una de las diez grandes familias de Ciudad Real, la familia Arrufat, con una fortuna de más de cien mil millones.

tan poderoso que, con solo estampar el pie, podía hacer temblar la

Roberto?” Yolanda entrecerró los ojos

cambió, mostrando

rostro apuesto

entrecerró los ojos y dijo, “Busca el itinerario más

cambió de inmediato, mostrando un calendario.

el calendario y luego se sentó frente al tocador para maquillarse

vestirse.