Capítulo19

Clara Pérez estaba confundida, incluso pensaba que el hombre a su lado era su hermano y comenzó a sollozar.

-¿Por qué Alejandro Hernández no me quiere?… ¿Por qué?– preguntó entre lágrimas.

Alejandro Hernández sintió su corazón latir con fuerza mientras escucha labios apretados.

s lamentos con

-He estado esforzandome mucho… realmente lo he intentado… pero parece que cuanto más me esfuerzo, más me odia… ¿por qué? ¡Dímelo!– exclamó Clara Pérez de repente, girándose y

abrazando al hombre, llorando fuertemente en su pecho y manchando su camisa impecable con lágrimas, mocos y maquillaje de colores.

Alejandro Hernández se quedó paralizado, su garganta se apretó, sintiendo cómo cada una de sus lágrimas ardientes se grababa en su pecho, impregnando su corazón.

Después de un momento, preguntó con voz profunda:

-¿Realmente te gusta mucho Alejandro Hernández?

Clara Pérez levantó su pequeña cara enrojecida por el llanto, abriendo ligeramente sus labios de

cereza.

El hombre sintió su garganta tensarse mientras resistía la tentación de sus deseos más puros.

Incluso se arrepintió de haber hecho esa pregunta.

o

inevitable entre ellos, su amor de por vida

un fuerte golpe y la puerta del

¿Qué te pasa? ¿No tienes vergüenza? ¿Comes

Pérez se puso tan furioso que abrazó a Clara Pérez

protegiendo a su polluelo.

ceño, un hombre elegante y sofisticado como siempre, y

cuánto se preocupa

sintió que su respiración era

alcohol, vomitó mucho antes. Si realmente la quieres, no deberías traerla a

punto de refutar a este neto, pero cuando lo llamó -señor

señot Hernández, ya que se ha divorciado de mi pequeña, no debería meterse en su vida. Vuelva y cuide bien a su señorita de oro.

Javier Pérez agarró a Clara Pérez y salió, pero Alejandro Hernández

-¿Qué estás haciendo?

amas?– Preguntó Alejandro Hernández con voz

-Obviamente.

-¿Puedes casarte con ella?

dejó a Javier Pérez

tienes que ver tú con eso? ¡Déjame

este tipo de juego emocional. Si no puedes casarte con ella, solo piensa en ella como una amante. No

segunda vez? ¿No crees que eso

Hernández sintió una punzada en el corazón y su corpulento

lo

dé la sombra de Flora Hernández!

responder, solo podía pensar en esa

transición-.

-Flora

en la barandilla con la cintura estrecha y lo

The Novel will be updated daily. Come back and continue reading tomorrow, everyone!

Comments ()

0/255