Receta para robarle el corazón al Dr. Farel

Esas palabras calientes se sucedían una tras otra.

Evrie levantó la mano para cubrirse el rostro, sus orejas y el cuello se tornaron rojos como la sangre.

—Clic—

La puerta del baño se abrió.

Farel salió envuelto en una bata de baño, que era claramente corta y de mujer, colgando sobre su cuerpo y dejando sus musculosas piernas al descubierto.

¡Era su bata!

Evrie lo miraba fijamente, con sus ojos llenos de determinación.

Pareciendo captar su pensamiento, Farel le habló con tacto.

—La ropa se ensució—, señaló hacia la ropa tirada en el suelo, —¿prefieres que ande desnudo? —

Evrie se giró.

—Vete, deja de fastidiarme. —

Farel —…—

Después de tantos años, su temperamento parecía haber aumentado.

Evrie se giró y entró al baño.

De todos modos, no quería esa bata de baño.

Ni quería quedarse en una casa tan incómoda con él, enfrentando un escenario tan explosivo.

Antes de cerrar la puerta, le lanzó una advertencia al exterior —Sr. Haro, espero que se haya marchado para cuando salga, o lo denunciaré por allanamiento de morada. —

Bang—

La puerta del baño se cerró sin piedad.

Farel se quedó quieto, bajando la mirada hacia las marcas de arañazos en su pecho, sus delgados labios se curvaron ligeramente.

Las garras del gato eran bastante afiladas.

Parece que las había guardado para arañarlo a él.

—Ding dong—

ese momento, sonó el timbre en

fue a abrir

estaba afuera —Sr. Haro, buenos

—Bien.copy right hot

—

finalmente su mirada

noche? ¿No

Joan lo conocía bien.

espera, al ver finalmente la marca de su obsesión, seguramente no pudo apartar los ojos de

una mirada —¿Hay algo que quieres

bolsas de papel

a las cuatro de la mañana, ya alimenté al

—Mmm. —

tomó las bolsas y dio una orden

hacia adentro con curiosidad —¿Y la

no entras tú y yo me voy?

retrocediendo —No, no, te esperaré en el carro, nos vemos

cerró la puerta

—…—

salió del baño, Farel ya estaba vestido

puso un negro, camisa blanca, puños inmaculados, corbata impecable, su apariencia era la de un

cabeza inclinada, estaba colocando el desayuno en la

los

te has ido? — le preguntó

algo en tu habitación y necesito llevarlo

se había cambiado de ropa y había cerrado la

hizo a un lado

Evrie captó ese movimiento.

el primer lujo que se había permitido

otro lado,

habitación y, conscientemente, se dirigió hacia la

que demorarse pudiera irritar

a la puerta,

estómago está peor que antes,

Evrie —¡Lárgate!—